Día del Perro: deudas y abandono amenazan el trabajo de agrupación animalista de Puerto Varas
Este 21 de julio es el Día del Perro y muchas familias celebran junto a sus mascotas. Sin embargo, las agrupaciones animalistas cargan con la otra cara de la realidad: el abandono, el maltrato y la falta de apoyo. En Puerto Varas, la Agrupación Kuppa —formada por cinco mujeres— lleva adelante una labor silenciosa y constante de rescate, recuperación y adopción de perros en situación de calle. Pero las deudas y el desgaste emocional amenazan con frenar su trabajo.
Una de sus integrantes es Maribel Correa, conocida por su cuenta en redes sociales como @conm_demestizas. Comenzó a rescatar animales hace cinco años en la Región de Coquimbo, y al llegar al sur continuó con la misma misión. Desde entonces ha rescatado a más de 100 perros. Hoy es parte activa de Agrupación Kuppa, agrupación nacida en Puerto Varas que busca organizar esfuerzos, activar redes y visibilizar el problema.
“Nos unimos porque cada día se observa más maltrato y abandonos, y necesitamos trabajar de manera organizada para activar recursos y llegar a más animalitos», afirma Maribel Correa.
El costo de un rescate puede partir en $100.000 por animal, considerando solo alimentación, atención veterinaria básica y accesorios. Si hay complicaciones médicas o es necesaria la hospitalización, los gastos pueden escalar fácilmente al millón de pesos. Maribel lo sabe por experiencia: aún arrastra una deuda de un caso que no logró sobrevivir.
“De mis últimos rescates complejos aún mantengo una deuda pese a que han pasado 4 meses desde que falleció. Entre veterinario, medicamentos y hospitalización gasté más de un millón, a pesar de que me hicieron algunos descuentos”, comenta Maribel.
Actualmente Agrupación Kuppa se enfrenta a un caso como el abandono de nueve cachorros recién nacidos en una caja durante pleno invierno en Puerto Varas. Al principio hubo apoyo, pero con el paso de los días la responsabilidad recayó solo en las rescatistas. Tres de los cachorros no sobrevivieron. Para Maribel, el mayor peso no es solo económico, sino también emocional.
“La más compleja de llevar es la carga emocional y mental, ya que la cantidad de abandonos es tan grande que no podemos rescatar ni ayudar a todos. En muchos otros casos, aunque lo intentemos, no logramos salvarlos”, expresa Maribel.
Cada rescate implica no solo salvar un animal: requiere atención médica, recuperación, socialización, búsqueda de hogar, entrevistas a adoptantes y seguimiento post adopción. Todo este trabajo recae, en su mayoría, en mujeres voluntarias, con recursos propios y pocas donaciones.
«Al ser rescatista independiente no recibo ningún tipo de apoyo estatal ni municipal, y esa fue una de las principales razones de haberme unido a otras rescatistas y formalizarnos como agrupación. Aunque sabemos que para postular a algún fondo estatal nos falta tener antigüedad mínima de 2 años, sí podemos recibir apoyo del Centro Veterinario Municipal de Puerto Varas, para nuestros rescatados, como esterilización y vacunas. Para mí es importante decir que a pesar de que en algún momento podremos optar a fondos, siempre la ayuda será poca si la comparamos con el nivel de abandono y maltrato que hay en nuestro país», asegura Maribel.
Su mirada es que la situación en Chile es crítica. Según el Censo Nacional de Mascotas (2022) de la Subsecretaría de Desarrollo Regional, existen más de 4 millones de perros y gatos sin tutor. Aunque el 2024 fue el año con más inscripciones en el Registro Nacional de Mascotas, Agrupación Kuppa estima que hay cerca de 10 millones de animales con dueño que aún no están registrados. Eso impide su identificación en caso de accidentes y deja a las agrupaciones como última línea de ayuda.